Desde el 25 de enero, EE.UU. tendrá una política más severa con los turistas.
A partir del pasado 25 de enero, las personas que no tengan la nacionalidad estadounidense y sean procedentes de Brasil, Irlanda, Gran Bretaña y otras 26 naciones europeas que permiten viajar a través de fronteras abiertas, tendrán restricciones para viajar a la nación norteamericana.
La orden también plantea la adición de Sudáfrica a la lista de países con restricciones de viaje lo que, destaca la preocupación del nuevo gobierno frente a las mutaciones del virus.
La variante registrada en Sudáfrica no se ha encontrado en Estados Unidos, pero otra variante, originada en Gran Bretaña, se ha detectado en varios estados.
La semana pasada, el presidente Joe Biden emitió una orden ejecutiva en la que instruyó a las agencias federales solicitarle a los viajeros internacionales que se coloquen en cuarentena tras llegar a la nación por vía aérea.
La orden también requiere que todos los pasajeros con destino a Estados Unidos de 2 años o más muestren una prueba negativa de COVID-19 realizada dentro de los tres días previos a su viaje.